Mis últimos tres años he trabajado como promotora en ferias, estadios de fútbol y centros comerciales. Como comprenderéis y es obvio, me exigían ir maquillada y con determinada ropa según donde estuviera. Claro está que no es lo mismo ir a un campo de fútbol que ir a trabajar a El Corte Ingles.
El año pasado por estas fechas fue cuando cambié totalmente por tener que trabajar para El Corte Ingles y se me exigía ir impecable. (Puedo decir que lo que más me sorprendió fue el hecho de tener que ir muy maquillada pero no llevar las uñas pintadas... cosa que no entendí porque no manipulaba en ningún momento con alimentos).
Como era bastante pez en el mundo del maquillaje, tuve que empezar a mirar blogs y vídeos en youtube de que productos de maquillaje necesitaba para ponerme "mona" para poder ir a trabajar. Pasé de utilizar lápiz de ojos a usar: antiojeras, base de maquillaje y lápiz de ojos.
Poco a poco empecé a saber más y empecé a comprar más cosillas: cacaos, máscaras de pestañas, bbcream, rizadores de pestañas, paletas y más paletas, sombras de ojos, pintalabios, cremas para los ojos...
Con el pelo me pasó algo parecido. Las que me seguís podréis ver mis fotos de instagram que tengo el pelo liso, pues bien, en realidad mi pelo es ondulado. Desde la raíz hasta las orejas esta liso pero a partir de las orejas, me salen ondulaciones.
Cuando pasé al instituto tenía el pelo rizado y tuve una amiga que me enseño el poder de la gomina. Sí, de gomina, y no de una cualquiera, era la famosa GIORGI extra fuerte y yo me echaba en el pelo kilos y kilos y más kilos de gomina. Mi pelo era pegamento. Mis padres estaban hasta la coronilla de mi porque dejaba todo hecho un asco. Pues así estuve echándomelo... ¿hasta los 17? si, creo que si. Muchas veces mi chico me habla de esa época donde parecía Úrsula, la bruja de la sirenita con el pelo tan tieso que parecían sus tentáculos. La verdad es que me avergüenzo de esa época.
Y desde el año pasado también, comencé a cuidarme más el cabello y a mirar por internet como tenerlo en su sitio. Fue un alivio aprender tanto porque gracias a eso, ahora cuando quiero tener mi pelo rizado esta totalmente de forma natural. Sin potingues en la cabeza. Eso sí, contra el pelo encrespado todavía no tengo solución, pero poco a poco chicas, poco a poco.
Ahora el cambio esta consistiendo en mi armario. Como he dicho al principio, trabajo de cara al público y aunque ya no trabaje como promotora, mi perfil de chica mona tengo que conservarlo. Y es que he pasado de trabajar los fines de semana y alguna que otra semana completa, a trabajar todos los días, y en mi armario no hay tanta ropa elegante como me gustaría. Este cambio esta siendo duro sobretodo para mi bolsillo, y porque soy MUY FAN de las sudaderas y el ir a comprar y no poder tener ni siquiera una, me esta matando.
Aunque todavía me queda mucho por aprender, estoy segura que el cambio va a ser a mejor, porque me ha empezado a gustar mucho este mundillo, me encanta el estilo que he creado. Estoy cómoda por como soy, ahora, por como voy a trabajar y de como me tratan mis clientes. Y es que siempre hay alguien que te saca una sonrisa diciéndote lo guapa que estas. Y eso chicas, siempre nos alegra el día.
Y tu...
¿Has tenido que cambiar por tu trabajo? ¿Has echado la vista atrás y te ha pasado algo parecido? ¿Qué te ha enseñado el mundo blogger?
A partir de ahora publicaré:
Los miércoles en al loro con la crisis
Los jueves aquí, en dulce locura 21
Próximamente tendréis nuevo vídeo en mi canal de youtube: Jessywi2821
No olvidéis que podéis seguirme en mis redes sociales
Hasta pronto
JESSY
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